domingo, 11 de diciembre de 2011

La precipitación no nos dejó durante todo el partido.


Ayer se rompió una racha que ya anduvo por el alambre la semana anterior. Le tocó el turno a una Olímpica guerrera, realizando una presión sobre todo el terreno de juego que nunca supimos controlar. El nerviosismo demostrado desde el banquillo y la precipitación de los jugadores hacían que una y otra vez los balones en terreno de nadie se los llevaran los jugadores de la Victoriana con fuerza y criterio para llegar a su zona de ataque con peligro. Las llegadas nuestras terminaran en nada, por un mal control o una prolongación del balón demasiada fuerte. Demasiadas facilidades para querer llevarse un partido.
Un equipo amarillo con carácter, oficio en el arte de parar el partido, guerrero como son los equipos de la Olímpica.
Nunca estuvimos dentro del mismo. Las órdenes que llegaban desde el banquillo eran contrarias a la forma de jugar el equipo. Nos mostramos indeciso a la hora de jugar con el compañero, no supimos manejar el mismo como sabemos, manejando el balón y rompiendo la línea defensiva del equipo contrario con llegadas desde la segunda línea. Lo mejor de las derrotas es que a los dos días tienes que levantarte e ir preparando el siguiente partido.
El trabajo no debe ser empañado por una derrota, una derrota que debemos de borrar lo más rápidamente posible y seguir trabajando.
La pájara nos venía anunciando que podía pasar, pero una nueva semana nos da la oportunidad para seguir trabajando.
Felicitar a la Olímpica Victoriana por la victoria y sobre todo a los jugadores de la Mandarina Mecánica por la recta final del partido que solo la suerte nos evitó que nos trajéramos mejor sabor de boca y como semana tras semanas a los goleadores del mismo. Miguel Ángel, Patrick los dos con dos goles y Pablo de los Ríos con uno.
Resultado final de 6-5 para la Olímpica Victoriana,
Saludos y nos vemos.

No hay comentarios: